Esta medida tiene como antecedente más reciente la derogación del visado -hasta el 29 de febrero de 2024- que se requería a los viajeros chinos que antes de la pandemia de Covid-19 representaban la nacionalidad más numerosa de visitantes procedentes del exterior.
Hasta ahora, la mayoría de los países a cuyos turistas no se les requiere visado en Tailandia, unas de las mayores potencias turísticas del mundo eran europeos y asiáticos mientras otros como Australia, Argentina, Brasil, Canadá, Estados Unidos y Perú que no incluían a los gigantes asiáticos China e India.
En el caso de los turistas rusos, el gobierno tailandés amplió hasta noventa días el tiempo que pueden permanecer en el país sin necesidad de solicitar visado.
Durante este periodo, el gobierno tailandés evaluará el resultado de estas medidas para valorar si exime los visados a algunos de estos países de manera permanente.
Entre enero y septiembre de 2023, Tailandia recibió veinte millones de turistas extranjeros principalmente de Malasia (3,30 millones), China (2,49 millones), Corea del Sur (1,19 millones), India (1,16 millones) y Rusia (más de 991.000).
Para fines de diciembre próximo se espera alcanzar entre veinticinco y treinta millones de turistas que equivaldría al 60 y 75% de los viajeros que llegaban antes de la irrupción de los contagios masivos de coronavirus.
Según datos oficiales, hasta poco tiempo antes de la pandemia desatada a inicios de 2020, Tailandia era la novena nación más visitadas a nivel global por detrás de potencias turísticas como Francia, España, Estados Unidos, China, Italia, Turquía, México y Alemania.
Una vez que concluyó el aislamiento social obligatorio preventivo, desde enero hasta octubre pasado ingresaron unos 400.000 viajeros del exterior, un flujo que luego se cortó abruptamente debido a las normas restrictivas que se instauraron ante la nueva ola de la variante Ómicron.