1 Península Valdés (Chubut, Argentina)
Cientos de ballenas francas australes llegan entre junio y diciembre para cumplir su ciclo reproductivo en este punto de la provincia argentina de Chubut que fue declarado Patrimonio Mundial de la Humanidad.
Con más de 2.500 ejemplares que la convierten en una de las mayores poblaciones de cetáceos del mundo, la ballena franca austral es la más destacada ya que mide quince metros de largo con un peso de cuarenta toneladas.
La Patagonia argentina se consolidó como uno de los principales destinos para observar cetáceos y ofrece excursiones en embarcaciones adentrándose en el océano para observar a estos mamíferos gigantes.
Las compañías que realizan estos paseos cuentan con habilitaciones estatales y certificación oficial bajo control gubernamental provincial para garantizar el cumplimiento de los principios de prevención ambiental.
2 Glacier Bay (Alaska)
Esta reserva natural estadounidense abarca más de cien kilómetros siendo un lugar de paso para las famosas ballenas grises que migran en primavera.
En estas aguas del océano Pacífico, los visitantes pueden observar un gran número tanto de ballenas grises como de orcas.
3 Hermanus (Sudáfrica)
En este pequeño pueblo situado a una hora y media de Ciudad del Cabo, las ballenas suelen acercarse tanto a la costa que no es necesario viajar en barco para verlas, salvo para quienes quieran una experiencia más in situ.
Centenares de ballenas francas llegan hasta la bahía sudafricana para su apareamiento entre los meses de julio y noviembre.
4 Islas Azores (Portugal)
Las islas Azores son uno de los mayores santuarios de ballenas a nivel mundial porque concentras veinticuatro especies diferentes de cetáceos entre residentes y migratorias.
Desde las torres costeras se divisan ballenas y delfines, quienes se embarquen también verán rorcuales norteños y ballenas barbadas. La época ideal para visitar el lugar y encontrar a estos animales es entre mayo y octubre.
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5 Bahía Hervey (Australia)
En las costas australianas de Queensland, más precisamente en la bahía de Hervey, se disfrutan los saltos de ballenas de más de cincuenta toneladas. Las embarcaciones suelen acercarse tanto a estos animales que es posible tocar a las ballenas. Suelen permanecer en el lugar desde julio hasta mediados de octubre.
6 Praia do Rosa (Brasil)
Esta playa del sur brasilero, bañada por el océano atlántico, recibe ballenas francas australes desde junio a noviembre. Sus saltos son tan altos que el 75% del cuerpo queda fuera del agua brindando un espectáculo único e imperdible.
7 Bahía Blanca (Costa Rica)
Esta localidad costarricense es uno de los puntos con mayor cantidad de ballenas jorobadas del mundo.
Son criaturas que migran dos veces al año -de diciembre a abril y de julio a septiembre- siempre a las cálidas aguas de esta bahía centroamericana para aparearse y tener crías.
El gobierno de Costa Rica creó el Parque Marino Ballena para proteger este santuario de ballenas y otras especies marinas como delfines comunes y nariz de botella, manta rayas y el tiburón martillo.
8 Monterey Bay, California (Estados Unidos)
Orcas, ballenas jorobadas, azules, francas y otras especies pueden avistarse en esta bahía cercana a la ciudad norteamericana de San Francisco.
Es posible disfrutar de la migración de ballenas gris de mediados de diciembre a abril. La gran ballena azul, el mayor cetáceo del mundo, puede observarse en verano y otoño.
9 Baja California (México)
En la península de Baja California existen lagunas de agua salada rodeadas por desierto donde las ballenas grises arriban para aparearse y tener a sus crías. El mejor período para avistamientos va de enero a abril pero durante el resto del año también pueden verse ejemplares de ballena azul de más de cien toneladas.
10 Islas Canarias (España)
Este es uno de los destinos privilegiados para avistar cetáceo gracias a la profundidad de sus aguas. Las excursiones que se adentran al océano en busca de grandes criaturas marinas como cachalotes, zifios, rorcuales o ballenas jorobadas, parten de cualquiera de estas islas.
Además del archipiélago, otros sitios son reconocidos por sus especies marinas. El estrecho de Gibraltar atrae varias especies por sus corrientes entre el Atlántico y el Mediterráneo. Grandes grupos de orcas llegan en verano buscando alimento. Por otro lado, Galicia y el mar Cantábrico son otros puntos donde pueden verse ballenas.
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