Según lo informado por las autoridades fronterizas, para ingresar a Chile desde Argentina habrá que exhibir un test de PCR negativo realizado 72 horas antes del viaje cuyo costo ronda los $6.000 en laboratorios particulares.

Además, una vez en suelo chileno, habrá que efectuarse un test de antígenos y PCR gratuito pero obligatorio para todo pasajero; chofer y tripulante de micros como vehículos particulares.

Quienes no tengan un Pase de Movilidad habilitado con esquema completo de vacunación, deberán realizar una cuarentena de siete días en el lugar que indiquen en la declaración jurada de ingreso.

También se exigirá un seguro médico de 30 mil dólares junto con la homologación de vacunas cuya tramitación podría demorar entre dos y tres semanas.

Gracias a esta apertura se destrabó un motivo de preocupación, en especial para aquellos argentinos que ya tenían contratadas sus vacaciones y se toparon con la prohibición de paso salvo para transporte de carga y residentes o extranjeros que deseaban retornar a su país de origen. A partir del pasado 15 de enero, sólo se habilitaba el acceso de tres colectivos por día.

Más camiones, menos testeos

Cerca de 3.000 transportistas están varados en Mendoza como protesta por las medidas sanitarias de la aduana chilena que exigieron que cada camionero sea hisopado, medida que hasta hace diez días se celebraba de forma aleatoria.

Las medidas se tornaron más férreas desde que Chile sufrió 14.780 nuevos contagios de coronavirus en apenas 24 horas, la cifra diaria más alta registrada en ese país desde el inicio de la pandemia.

Según informó la agencia de noticias Sputnik, Chile alcanzó un total de 1.984.190 casos de Covid-19 desde que irrumpió la pandemia. El ministerio de salud trasandino corroboró que este pico supera a los tres anteriores de 9.509 nuevos casos el miércoles, 12.500 el jueves y 14.757 el viernes.

En base a estas estadísticas, Chile cuenta con 66.738 casos activos que son potenciales focos infecciosos. En las últimas 24 horas se contabilizaron 23 muertes a causa del coronavirus, elevando a 39.535 víctimas fatales en un lapso de casi dos años.

Desde el ministerio de salud chileno se explicó que hay 410 pacientes con coronavirus internados en unidades de cuidados intensivos, de los cuales, 316 reciben asistencia mecánica.