Desde la ciudad alemana de Hamburgo donde participa de la convención Seatrade Europe considerada como la más importante del mundo en viajes fluviales y marítimos, Monzeglio ratificó que el gobierno uruguayo apoya esta iniciativa que forma parte del proyecto más amplio e integrador que el Ente Administrador del Puerto Rosario (ENAPRO) propuso durante el noveno Encuentro Regional de Cruceros y Turismo Náutico Fluvial celebrado en Montevideo.
“Queremos explorar esta alternativa, estamos abiertos a esta iniciativa”, afirmó Monzeglio adelantando que ya se están realizando batimetrías para saber el calado y a qué distancia de la costa podrían acercarse las embarcaciones.
El funcionario uruguayo consideró ideal que lo buques recalen lo más cerca posible de la costa y, para eso, están efectuando los estudios correspondientes dado que varios operadores interesados cuentan con buques con capacidad de entre doscientos y mil pasajeros.
Como lo adelantamos en ElDiariodeViaje, el gestor de desarrollo turístico del ENAPRO, Ricardo Terán celebró que las autoridades portuarias de Uruguay adhirieron a esta idea tras conocerse que los estudios efectuados por la Prefectura y Armada Argentina constataron la viabilidad de la ruta para viajes seguros movilizando pasajeros.
El Ente Administrador del Puerto de Rosario (ENAPRO) propuso la creación una mesa interdisciplinaria entre Argentina, Uruguay, Brasil y Paraguay para impulsar al máximo tanto el turismo como la actividad comercial y productiva a nivel regional.
El proyecto capitalizaría al máximo el potencial de estas cuatro naciones extendiéndose más allá de la industria de los cruceros.
“Queremos implementar una mesa portuaria interdisciplinaria articulando la función pública con el sector empresarial privado para que Argentina; Brasil; Paraguay y Uruguay trabajen en conjunto en materia de turismo extendiéndose a la actividad comercial; productiva y transporte multimodal fluvial”, explicó el presidente del ENAPRO, Guillermo Miguel al disertar ante los funcionarios; empresarios; profesionales y académicos reunidos en la sala Delmira Agustini del montevideano Teatro Solís.