La ministra de turismo salvadoreña Morena Valdéz informó públicamente a la prensa local que, a través de diferentes billeteras virtuales como Chivo Wallet, la industria de los viajes es la número uno del Top-10 de los rubros amigables con el dinero digital.

Si bien existe un voluminoso sector informal al margen de los registros estatales, la cifra es alentadora considerando que El Salvador contabiliza 3.418 empresas turísticas habilitadas, de las cuales, quinientas ya operan con criptomonedas.

La titular de la cartera salvadoreña comunicó que las monedas digitales impulsaron el turismo en un 30% sumado a que sus usuarios tienen una elevada permanencia promedio de cinco meses.

De las diez principales industrias amigables con las criptomonedas, los viajes representan la número uno gracias a que el 11,5% de las empresas de nuestro sector aceptan pagos con criptoactivos. 

Según los economistas, esta aceptación de pagos virtuales demuestra la evolución de las criptomonedas tanto por parte de los consumidores como de las empresas que finalmente se dan cuenta de los beneficios y ventajas que aporta este sistema.

Por su parte, el presidente salvadoreño Nayib Bukele afirmó que el Bitcoin forma parte “de una estrategia diseñada para impulsar la economía de manera sostenida en el largo plazo” con el turismo como el primero de los rubros en los que se obtuvo un resultado positivo.

Son divisas digitales que sólo existen en el universo virtual pero sirven para comprar productos y servicios como si fuese un billete en papel. Las criptomonedas se perfilan como opciones financieras para adquirir paquetes turísticos de manera más expeditiva con la posibilidad de manejarse cotidianamente en cualquier país extranjero sin conversión alguna a la divisa local ni siquiera al dólar estadounidense.

Consolidadas como las más populares e importantes del mercado, Bitcoin y Ethereum treparon a su máximo valor histórico durante 2021. En la actualidad se estima que más de cien millones de personas, distribuidas en los cinco continentes, invirtió en algún tipo de criptomoneda aceptada para abonar transacciones comerciales vinculadas al turismo.