Según los estudios elaborados por el gobierno local, un turista extranjero que ingresa a República Dominicana para tratamiento médico suele gastar un promedio de 7.500 dólares que incluyen alojamiento, traslados internos y comidas sin contar el pasaje aéreo.

Este dato refleja la relevancia de este segmento de la industria de los viajes porque implica un gasto promedio seis veces  mayor al que realiza un turista convencional que vacaciona por ocio o esparcimiento sin pisar un consultorio médico.

El progreso del turismo médico dominicana es exponencial dado que en 2018 le aportó 265 millones de dólares a la economía nacional cuando en 2022, apenas cuatro años después con la inactividad obligada por la pandemia de Covid, contribuyó con 1.321 millones de la divisa norteamericana.

Del total de 262.902 extranjeros que visitaron República Dominicana en busca de tratamiento médico, más de la mitad lo hizo para tratarse en consultorios de odontología mientras que 40.000 viajaron por cirugías plásticas y 26.290 por otro tipo de intervención quirúrgica.

Tanto las autoridades estatales como los expertos del sector privado estiman que el turismo médico de República Dominicana podría captar medio millón de pacientes extranjeros al año a partir de 2028.

El ministro dominicano de salud, Daniel Rivera, consideró que el desarrollo sostenible del turismo de salud y bienestar demanda una ruta crítica basada en una adecuada inversión pública y privada en infraestructura sanitaria, efectuar un compromiso demostrable con la acreditación internacional y brindar garantía de calidad y la transparencia de los resultados.

Como forma de lograr un flujo constante e importante de pacientes provenientes del exterior, el titular de la cartera consideró que habrá que “garantizar un ahorro de costos en procedimientos médicos para quienes visitan el país, mantener una adecuada planta turística, avanzar en innovación y tecnología y formar y capacitar a personal médico, técnico y de enfermería altamente competentes y con calidad internacional”.

República Dominicana es uno de los líderes caribeños en materia de conectividad aérea como lo demuestran las estadísticas al recibir 8,5 millones -7,1 por vía aérea y más de 1,3 por cruceros- de turistas extranjeros durante 2022.

Las proyecciones estatales estiman que este año arribarán 10 millones de turistas procedentes del exterior, de los cuales, 7,8 llegarán por avión mientras los 2,2 millones restantes atracarán a bordo de cruceros.

El país caribeño disfruta de un crecimiento de su industria de los viajes que se potencia gracias a los incentivos fiscales gubernamentales. Como parte de un trabajo en equipo entre el sector público y privado, República Dominicana apunta a captar 1.300 millones de euros en inversión turística.