Si bien todavía no se conoció el texto del anteproyecto legislativo, la intención gubernamental trasandina consistiría en no exigir al comercio que se certifique ante la autoridad fiscal para que los turistas solo deban presentar la boleta del producto o servicio a declarar.

De implementarse esta exención impositiva se beneficiarían a los miles de argentinos que cruzan la Cordillera, especialmente los fines de semana, para realizar turismo de compras en Chile donde les resultaba más barato adquirir tecnología e indumentaria.

El ministro de hacienda chileno Mario Marcel explicó que la medida abarcaría a las compras efectuadas por los turistas extranjeros dentro del país para consumir o utilizar fronteras afueras.

“El proyecto ingresará la semana que viene al Congreso Nacional y lo hará por la Cámara de Diputados ya que tiene medidas tributarias”, adelantó el titular de la cartera chilena.

El funcionario también detalló que, de aprobarse esta normativa, más del 60% de los gastos realizados por turistas extranjeros estarán exentos de IVA porque los otros gastos significativos, transporte de pasajeros y servicios de hospedaje ya están eximidos en la actualidad.

El proyecto también contempla la devolución del IVA a producciones audiovisuales extranjeras realizadas en Chile incluyendo un incentivo similar a los implementados en países como Nueva Zelanda para estimular la industria de la comunicación y el entretenimiento.

Consolidado como uno de los países que impuso restricciones más rígidas y extensas durante la pandemia de Covid, Chile atrajo 3,7 millones de turistas extranjeros en 2023 que representó una merma del 17,4% en relación a 2019,.

Pese a la disminución de las llegadas de turistas extranjeros, el total de divisas generadas por el turismo en 2023 superó los 13.000 millones de dólares superando lo registrado antes de la irrupción de la ola de contagios masivos de coronavirus.

 “La pandemia cambió la proporción entre turismo nacional e internacional. Tenemos un 10% más de turismo local, hay cambios de conductas importantes en nuestros compatriotas que deciden viajar por el país en los fines de semana largos”, señaló la subsecretaria de turismo, Vero Pardo.

La iniciativa legislativa también propone duplicar los recursos para la promoción turística internacional hasta los veinte millones de dólares anuales, una cantidad que es “mayor a lo que destina Argentina” que se erige como el gran faro
turístico suramericano según la descripción de la subsecretaria Pardo.

Para financiar este aumento se creará una tasa del 1,25% sobre el precio de los servicios de hospedaje contratados por turistas extranjeros que se extiende a plataformas digitales como Airbnb.