En el estadio BRB Mané Garrincha en la capital Brasilia, esta exposición le abrirá sus puertas a medio centenar de compradores internacionales con alto potencial de negocios que se conectarán con empresarios turísticos nacionales, en alianza con la SETUR local y el Embratur, organismo estatal que promueve la industria brasilera de los viajes.
Distribuidos a lo largo de 37.000 metros cuadrados, habrá 2.000 marcas expositoras que consolidarán un crecimiento del 37% en el número de operadores más un 86% de aumento de nuevos expositores o no expositores en los últimos tres años.
Los organizadores estiman que se expondrán alrededor de quince destinos internacionales; veinticinco UF con stand propio, una representada por su capital y el Distrito Federal, una veintena de compañías hoteleras e idéntica cantidad de empresas tecnológicas en ambos casos con stand propio.
Como un muestra de la popularidad e importancia de este evento, según datos difundidos por el medio de comunicación brasilero Panrotas, a fines de febrero pasado ya se había vendido el 68% del total del espacio destinado a las firmas expositoras.
Bajo el lema Todo el mundo del turismo está ahí, la feria congregará a medio centenar compradores procedentes de Estados Unidos, México, Argentina, Paraguay, Chile, Uruguay, Perú, Colombia, Bolivia, España, Italia, Alemania, Reino Unido, Países Bajos y Portugal.
A su vez, como sucede en cada temporada, también se llevarán a cabo encuentros cerrados donde los invitados -previamente seleccionados- analizarán los temas centrales de las agendas importantes para el sector turístico siguiendo el enfoque de promoción del sector.
Según datos gubernamentales oficiales, durante mayo de 2023 ingresaron 567 millones de dólares –equivalente a 517 millones de euros- a Brasil a través de las compras de productos y servicios realizadas por turistas que representa el récord histórico del quinto mes en cualquiera de los años anteriores.
De acuerdo a la información del Banco Central de Brasil, hubo un crecimiento del 52% en comparación a los 373 millones de dólares, unos 340 millones de euros, que se registraron por ingresos turísticos en mayo de 2022.
Brasil aumentó su turismo receptivo gracias a la expansión de su conectividad aérea. A pesar de transitar la temporada baja, en noviembre pasado, arribaron 4.367 vuelos internacionales a Brasil representando un 95% del total registrado en 2019 previo a la pandemia de Covid-19.
Según los datos oficiales gubernamentales recabados a través de la Agencia Brasilera de Promoción Internacional del Turismo (Embratur), estos 4.367 vuelos procedentes del exterior implicaron un crecimiento del 44,54% en comparación a ese mismo mes pero del año pasado.