La bicicleta es el mejor transporte para recorrer La Ciudad Luz porque evitarás el tráfico arriba de un colectivo o taxi sin incurrir en el subte que impide disfrutar del paisaje.
Además de no contaminar y contribuir a tu calidad de vida, pedaleando aprovecharás el Plan Vélo que la alcaldesa Anne Hidalgo implementó en 2014 construyendo ciclovías separadas del tránsito automotor con 60.000 espacios de estacionamiento y un sistema público de alquiler.
Rodando tranquilo por el asfalto parisino, llegarás a La Sorbona, una de las universidades más prestigiosas en el campo de las letras y humanidades gracias a docentes y egresados como, entre otras figuras, Pierre y Marie Curie; LouIs Pasteur; Lavoisier y Víctor Hugo más la dupla de Simone de Beauvoir y Jean Paul Sartre cuyas obras son pilares del existencialismo como corriente filosófica que promueve los principios de libertad y responsabilidad individual.
También podés recorrer París en barco por el río Sena que parte desde la Torre Eiffel disfrutando sus dos orillas con los museos del Louvre, D’Orsy, Grand Palais e Invalides más Place de La Concorde, Catedral de Notre-Dame y la Conciergerie.
Es la cuna de la república del mundo moderno tal como lo conocemos hoy en día. Después de la antigua Grecia está la urbe gala con su iluminación del siglo 18 cuando diseminó la Era de la Razón o Ilustración en toda Europa.
París marca tendencia en las pasarelas de la moda y alta costura, también influyó de manera determinante en el mundo de las ideas.
Cultura y arte
Encabezados por el Louvre donde habita La Gioconda pintada por Leonardo Da Vinci a principios de 1500, París tiene más de 150 museos entre los que sobresale Orsay, la vieja estación de tren cuyo edificio es una obra de arte que, en 1986, se convirtió en vitrina de la pintura expresionista.
En la avenida Mahatma Gandhi se levanta la Fundación Louis Vuitton con vistas panorámicas a través de sus grandes ventanales y que ofrece once galerías dedicadas al arte moderno.
Siempre sugiero visitar el palacio de Versalles, un patrimonio de la humanidad donde en 1919 se firmó el tratado de paz que terminó con la Primera Guerra Mundial. Por cuatro euros, con una frecuencia diaria de quince minutos, la línea C del tren RER te llevará en sólo media hora.
Cuna de la Revolución Francesa que, con el lema de Robespierre que reza Libertad; Igualdad y Fraternidad, inspiró a librepensadores y demócratas de todo el mundo, París debe disfrutarse desde arriba de la Torre Eiffel, una joya arquitectónica que tiene dos restaurantes para diferentes paladares y bolsillos.
Reconocida como la avenida más hermosa del mundo, los dos kilómetros de largo de los Campos Elíseos, con su Arco del Triunfo, es escenario de cafés y locales de artículos de lujo pero también de teatros, una oferta cultura en la que se destacan la Ópera Garnier y la Olympia de París.
París es la mejor ciudad, yo la recorrí con la mejor compañía.