Anteriormente aplicado bajo el nombre de Experiencias do Brasil Original, este proyecto gubernamental capitalizará al máximo la capacidad del turismo para diversificar los ingresos y generar nuevos puestos de trabajo en las zonas más necesitadas del interior de esta nación que, en esta era post pandemia de Covid, mantuvo su condición de principal destino sudamericano.
Una encuesta oficial efectuada entre los empresarios que intervinieron en este proyecto reveló que el turismo se consolidó como un factor decisivo en el desarrollo sostenible de las comunidades rurales del país.
“Apoyaremos el turismo de las experiencias en las comunidades tradicionales del país llegando a trabajadoras agrícolas familiares, especialmente mujeres, y aquellos que viven en áreas indígenas para mejorar su realidad con oportunidades de crecimiento y un ingreso alternativo y nuevos empleos”, afirmó Daniela Carneiro, titular de la cartera brasilera.
La ministra de turismo de Brasil destacó que, según surge de las estadísticas oficiales, en las dos ediciones anteriores hubo mayoría femenina porque las mujeres ocuparon el 56% de los cupos de participantes.
“Ahora apuntamos a preservar las culturas y tradiciones y, al mismo tiempo, estructurar los itinerarios turísticos con acciones que van desde la capacitación hasta la promoción de servicios y productos”, detalló la ministra brasilera en diálogo con la prensa local.
Esta acción cuenta con el respaldo del Ministerio de Desarrollo Agrario y Agricultura Familiar y la Universidad Federal de Fluminense (UFF) junto con los ministerios de los pueblos indígenas y la igualdad racial así como la institución de la Sociedad Alemana de Cooperación Internacional.
Entre las mejoras señaladas en los lugares que participaron en el proyecto se encuentran la expansión de la señalización turística, incluso con el apoyo de mapas y acciones de facilitación.
Brasil aumentó su turismo receptivo gracias a la expansión de su conectividad aérea. A pesar de transitar la temporada baja, en noviembre pasado, arribaron 4.367 vuelos internacionales a Brasil representando un 95% del total registrado en 2019 previo a la pandemia de Covid-19.
Según los datos oficiales gubernamentales recabados a través de la Agencia Brasilera de Promoción Internacional del Turismo (Embratur), estos 4.367 vuelos procedentes del exterior implicaron un crecimiento del 44,54% en comparación a ese mismo mes pero del año pasado.