Los disturbios comenzaron a raíz de rumores falsos sobre el adolescente sospechoso de un ataque con arma blanca en Southport que erróneamente se dijo que era musulmán e inmigrante. Los enfrentamientos tuvieron como protagonistas a grupos de extrema derecha que atacaron a policías, causaron incendios y provocaron casi cuatrocientas detenciones. El Gobierno británico aumentará los efectivos policiales y acelerará la justicia penal para abordar la situación.
Nigeria, Malasia e Indonesia también emitieron advertencias de viaje en respuesta a la situación. En Malasia, el Ministerio de Asuntos Exteriores instó a los ciudadanos a "mantenerse alejados de las zonas de protesta, permanecer vigilantes y seguir las últimas actualizaciones y orientaciones proporcionadas por las autoridades locales".
Australia, por su parte, ha aconsejado a los viajeros que "ejercen un alto grado de precaución". En una actualización emitida el lunes, el Gobierno australiano recomendó evitar las áreas donde se están produciendo protestas debido a la posibilidad de disturbios y violencia. Los viajeros deben seguir las instrucciones de las autoridades locales para garantizar su seguridad.
La advertencia de estos países destaca el aumento de la preocupación internacional sobre la seguridad en el Reino Unido donde la situación sigue evolucionando rápidamente. La violencia y los disturbios han alterado la normalidad en varias ciudades importantes, lo que ha llevado a gobiernos extranjeros a actuar para proteger a sus ciudadanos en el extranjero.
Las recomendaciones de Australia y Malasia se suman a las de otros países que ya habían alertado a sus ciudadanos sobre los riesgos de viajar al Reino Unido. Estas medidas reflejan un reconocimiento global de la creciente inseguridad en el país, exacerbada por los recientes eventos violentos.
El gobierno británico enfrenta un desafío considerable para restaurar la calma y garantizar la seguridad pública, mientras se esfuerza por abordar la raíz de los disturbios y restaurar la normalidad en las áreas afectadas. Las autoridades han prometido una respuesta firme y eficaz para contener la violencia y proteger a los residentes y visitantes por igual.
Mientras tanto, la comunidad internacional sigue de cerca la evolución de la situación, y las advertencias de viaje se ajustan conforme se desarrollan los acontecimientos. Los viajeros y residentes en el Reino Unido deben mantenerse informados y seguir las directrices de las autoridades locales para minimizar los riesgos asociados con la situación actual.