La conmoción social y religiosa generada por el deceso del Sumo Pontífice impulsó una demanda aérea sin precedentes desde Buenos Aires hacia Roma. Nuestra compañía de bandera confirmó que todos sus vuelos programados para los días martes, jueves y viernes previos al funeral ya no tienen espacio disponible. Por el momento, no está previsto sumar nuevas frecuencias especiales.
Además, agencias de viaje y portales como Despegar.com reportaron que aunque aún quedan algunos pasajes, los precios se dispararon a más de 2.200 dólares para vuelos con escalas hasta 2.458 dólares para viajes directos. Este aumento responde a la urgencia y emotividad que mueve a miles de argentinos a participar de una despedida histórica.
Las aerolíneas internacionales como Air France, KLM, Lufthansa e ITA Airways ofrecen opciones variables con tiempos de viaje aproximados de trece horas. Sin embargo, la combinación de escalas y costos elevados representa un desafío considerable para viajeros argentinos, mayoritariamente profesionales que valoran la inversión en sus viajes.
El Vaticano confirmó el cronograma oficial de los actos fúnebres, que comenzarán con el traslado del féretro en la mañana del miércoles 23 de abril. La Basílica de San Pedro estará abierta para que los fieles puedan acercarse y despedir al papa desde ese mismo día hasta el viernes 25, con horarios extendidos para facilitar el acceso. La ceremonia principal se celebrará el sábado 26 de abril bajo un protocolo sencillo y renovado.
Este evento histórico invita a la industria turística argentina a reflexionar sobre la capacidad de respuesta ante situaciones excepcionales que movilizan al mundo entero. La empatía con los viajeros que buscan cumplir un acto de fe tan significativo y la colaboración interinstitucional serán claves para superar estos desafíos.
Ademá, esto refleja la conexión profunda de Argentina con el legado del papa Francisco, un símbolo de esperanza y unidad para millones. Este momento histórico puede transformar la manera en que el sector viajes y turismo planifica y gestiona contingencias de alto impacto emocional y logístico, fortaleciendo así su resiliencia y calidad de servicio.
Argentina es un destino relevante para el turismo religioso que creció 18% en la cantidad de viajeros en relación al año anterior gracias a los atractivos vinculados a la espiritualidad y la fe. Uno de los principales destinos para el turismo religioso en Argentina es la ciudad de Luján, en la provincia de Buenos Aires. El Santuario de Nuestra Señora de Luján recibió dos millones de visitantes que implicó un 20% más en comparación a los últimos doce meses por el impulso de eventos y festividades que atraen a fieles de diversas regiones.