Estos datos son resultado de un relevamiento realizado por técnicos de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) que evidenciaron tendencias claras en el comportamiento de los usuarios y representó una señal positiva para la reactivación de la industria argentina de los viajes.
La característica más destacada fue el denominado turismo de cercanía, protagonizado por viajeros que optaron por destinos próximos, gastaron menos que en ocasiones anteriores y realizaron estadías más cortas. Esta modalidad refleja un cambio de hábitos en respuesta a la coyuntura económica actual, donde las promociones y actividades gratuitas se convirtieron en grandes atractivos para los turistas argentinos.
En consonancia con esta tendencia, el turismo rural, las escapadas a ciudades intermedias y los destinos que ofrecieron descuentos especiales tuvieron un desempeño superior, demostrando que el sector sabe adaptarse a las nuevas demandas y preferencias de los viajeros. Esta adaptación es clave para mantener el dinamismo turístico tanto en temporada alta como en fines de semana largos.
Además, se destacó la elección de algunos turistas por destinos internacionales cercanos: más de 20.000 argentinos cruzaron hacia Chile por el Paso Cristo Redentor, impulsando además la economía traandina mediante compras en indumentaria y tecnología. Este flujo, que tuvo su pico el 1° de mayo con 8.000 personas cruzando la frontera, subraya la creciente integración regional y el potencial turístico transfronterizo.
Este fin de semana largo superó ampliamente el desempeño del mismo período en 2023, con un crecimiento del 26% en cantidad de turistas y un aumento del 42,6% en gasto total en términos reales, a pesar de que el feriado de 2023 fue de tres días.
Comparado con 2018, último año con cuatro días feriados, se observaron progresos significativos en turistas (+15,9%) y gasto (+24,4%), aunque la estadía promedio cayó un 10% (de 3 a 2,7 días).
Estos indicadores anticipan un 2025 muy auspicioso para la industria donde en apenas tres fines de semana largos el país convocó a más de 6,6 millones de turistas que generaron consumos por 1,7 billones de pesos que equivalen a 1.428 millones de dólares. El sector aeronáutico también mostró vigor, con Aerolíneas Argentinas movilizando cerca de 160.000 pasajeros nacionales, y más del 80% de ocupación en vuelos domésticos.
Los destinos más solicitados por los viajeros locales siguen siendo clave para la economía regional: Mendoza, Córdoba, Bariloche, Iguazú, Neuquén, Salta, Ushuaia y El Calafate lideran las preferencias, acompañados por destinos extranjeros como la ciudad brasilera de Río de Janeiro. Esto reafirma el compromiso de los profesionales de la industria para seguir ofreciendo experiencias memorables y promover la diversidad turística del país.