Ubicada en la localidad de Antofagasta de la Sierra, al noroeste de la provincia de Catamarca, esta reserva natural constituye un área protegida por la Ley 5.070 cuyo artículo 54 establece una pena equivalente al valor actual de 5.000 litros de combustible que equivale a unos 650.000 pesos para cada uno de los cuatro turistas que circularon por la laderal del volcán, una zona expresamente vedada para esa actividad.
“El martes pasado unos turistas recorrieron nuestra zona de la puna catamarqueña e infringieron la Ley 5.070 que regula la creación y manejo de las áreas protegidas en nuestra provincia”, aseguró el jefe de la División de Guardaparques de Catamarca, Wilson Solohaga.
En declaraciones publicadas por el diario porteño Página12, Solohaga explicó que estas personas “se salieron de la ruta habilitada para el turismo y dañaron el patrimonio natural de la zona que va a tardar muchísimos años en recuperarse naturalmente, entre 30 y 40 años para que el accionar del ambiente pueda restaurar ese lugar”.
El funcionario precisó que la zona tiene carteles que indican expresamente que esta prohibido ingresar a la zona de volcanes.
Solohaga explicó, en diálogo con el canal televisivo TN, que se dañó la ladera del volcán por "las huellas que dejaron los cuatriciclos al treparse en una superficie con una capa muy fina de color negro que se perjudica con apenas caminarlo”.
Según el guardaparque, hay cuatro personas identificadas que asumieron la responsabilidad y pidieron disculpas aunque, aún así, tratándose de un área protegida, tendrán que pagar la multa.
“No respetaron la señalización. Se ofrecieron a venir con rastrillos y solucionar la macana que se mandaron pero es imposible arreglarlo. Lo que provocaron es inadmisible”, advirtió Carlos Barrionuevo, director de Biodiversidad y Áreas Naturales Protegidas de la provincia.
El área protegida campo tiene más de 5.000 formaciones rocosas concentradas en un área de veinticinco kilómetros de extensión con un mar de piedras pómez que parecen olas petrificadas.