De acuerdo a lo informado por el sitio web oficial Argentina.gob.ar, los guardaparques locales constataron que los perjuicios ocasionados en el área ubicada a nueve kilómetros del emblemático Cañón revisten tal gravedad que la Administración de Parques Nacionales se constituirá como parte querellante en los tribunales provinciales.
Como otro antecedente reciente, en abril pasado y tal como informamos en ElDiariodeViaje, cuatro turistas deberán abonar 650.000 pesos cada uno como multa por el daño que causaron al transitar con cuatriciclos por la reserva natural catamarqueña Campo de Piedra Pómez al que le demandará unos cuarenta años la recuperación del suelo.
“Estoy haciendo jeroglíficos para que sepan mis sucesores que yo estuve acá y crean que lo hice por algo específicamente y que tiene un significado. Total, esto dura 2500 años”, se lo ve y escucha decir al usuario de Tik Tok, @joacandussi, quien luego eliminó su video cerrando la cuenta ante el repudio generalizado y el accionar de la justicia federal riojana.
Este parque argentino alberga una amplia gama de antepasados de mamíferos, vestigios de dinosaurios y plantas que ilustran la evolución de los vertebrados y las características de los paleoambientes del período triásico.
Junto al sanjuanino Ischigualasto forman el conjunto continental de fósiles más completo a nivel global. El área protegida se creó como parque provincial en 1975 y veintidós años después se elevó a categoría nacional. Hace más de dos décadas fue designado Patrimonio Mundial de la Humanidad por la UNESCO.
Talampaya comparte con Ischigualasto la cuenca geográfica triásica. El parque cuenta con rocas que documentan la evolución del planeta por más de cuarenta y cinco millones de años, siendo por ejemplo testigo hace más de 250 millones de años de la división del supercontinente Pangea. Está considerado uno de los paraísos más importantes en material geológico de Argentina.
La formación Talampaya está compuesta por una aglomeración de rocas de color rojo parduzco. Las paredes y el cañón del río Talampaya fueron erosionados por el viento y el agua, dándoles curiosas formas. Al paisaje se suman morteros colectivos, restos de viviendas indígenas y petroglifos de gran antigüedad. Los estratos están principalmente formados por arenisca depositada por los abanicos aluviales que bajaron de los bordes de la cuenca.
El parque es un importante yacimiento paleontológico y entre los fósiles se encuentra el Lagosuchus talampayensis, uno de los primeros arcosaurios que habitó nuestro planeta hace 250 millones de años en los inicios del triásico. También se encontraron fósiles de tortugas con una antigüedad de 210 millones de años, como la Palaeocheris talampayens.
Gracias a una larga serie de animales fósiles desconocidos para la paleontología se está completando uno de los estudios más interesantes de esta ciencia paleontológica: cómo y cuándo surgieron los primeros dinosaurios, además de brindar mayor certeza sobre el surgimiento de reptiles mamiferoides de cuyo tronco básico proceden los actuales mamíferos.
Los bruscos cambios de temperatura causaron un cincelamiento natural con rotura de grandes placas tectónicas que datan de hace 250 millones de años.
En la zona datan ocupaciones humanas del año 120 y 1180 de nuestra era donde se encontraron importantes grabados y pintados descubiertos en piedras y cerámicas. El núcleo más importante corresponde a la zona Los Pizarrones sobre el cauce de un arroyo temporario afluente del río Talampaya, en un sector plano y liso de roca de quince metros de largo cubierto de grabados esculpidos (petroglifos) varios siglos antes de la conquista.
También se hallaron restos de viviendas y de muros de piedra, fragmentos de barro cocido y material lítico proveniente de la confección de elementos de roca.