Esta iniciativa apunta a mejorar la gestión de políticas turísticas y promover un desarrollo más equilibrado entre las regiones de la provincia.

Durante las reuniones realizadas en Bariloche y Las Grutas, empresarios y referentes del sector expresaron su entusiasmo por la propuesta aunque también surgieron inquietudes e incluso alguna voz disonante por parte de la industria rionegrina de los viajes.

Walter Sequeira, presidente de la Cámara de Comercio y Turismo de Las Grutas, destacó que la agencia podría ser "un instrumento ágil" para potenciar zonas menos desarrolladas turísticamente.

Por su parte, Orieta Lillo, presidenta de la Cámara de Turismo de Río Negro, valoró los aportes realizados por representantes de agencias similares de provincias como Mendoza, Córdoba y Buenos Aires.

El diseño propuesto para la agencia incluye autarquía y financiamiento propio con fondos provenientes de un porcentaje de la recaudación total de Ingresos Brutos, similar al esquema implementado en Mendoza.

Según Lillo, la agencia mendocina dispone de un 0,5% de esos ingresos, lo que le permitió contar con un presupuesto de 9.000 millones de pesos este año.

En el caso rionegrino, los recursos estarían destinados tanto a la promoción turística como a obras de infraestructura específicas con una limitación del 20% del presupuesto para gastos administrativos.

Aunque el proyecto genera expectativas, se espera un intenso debate en la Legislatura, donde el sector privado anhela una participación activa en el diseño final de la iniciativa.