Para este segmento se vive su temporada alta durante los meses del verano debido a las mejores condiciones climáticas. Además, las empresas ofrecen traslados exclusivos al complejo El Azufre, un centro de esquí accesible únicamente por vía aérea.
El Aeropuerto Internacional de Mendoza también refleja el interés por el transporte de lujo. Entre enero y septiembre de 2024, se registraron 1.463 vuelos privados, de los cuales 273 fueron internacionales según datos de Aeropuertos 2000.
Estos vuelos transportaron a más de 9.000 personas a la región, reafirmando el crecimiento de esta modalidad asociada directamente al turismo de lujo cuyo poder adquisitivo triplica el gasto promedio de un visitante convencional.
Los vuelos panorámicos, como el recorrido desde Horcones hasta la pared Sur del Aconcagua, se han convertido en una de las actividades más solicitadas. Este recorrido, único en su tipo, tiene un costo de 400 dólares por persona, mientras que la hora de vuelo en helicóptero asciende a 2.200 dólares más impuestos.
Entre las experiencias destacadas, se encuentran celebraciones privadas en la cordillera como la de un turista estadounidense que alquiló un helicóptero durante tres días para sorprender a su esposa. Estas actividades incluyen picnics en paisajes inaccesibles por otros medios.
El turismo de lujo en Mendoza, potenciado por el enoturismo y la montaña, sigue atrayendo a un público que valora la exclusividad y el acceso a experiencias únicas, consolidando a la región cuyana argentina como un destino de primer nivel internacional.
Este crecimiento no solo evidencia la recuperación del sector tras la pandemia de Covid-19 sino también un cambio en las preferencias de los consumidores porque ahora buscan cada vez más confort, exclusividad y experiencias inmersivas en sus destinos vacacionales.