1 Brasilia:
Junto al Embratur (Ente de Promoción del Turismo Internacional), la capital brasilera desarrolló una Guía de Arquitectura para el Turismo Accesible con información sobre vías de acceso, medios de transportes y sitios de interés como el Memorial JK, Parque de la Ciudad, la Catedral, el Planetario, la Torre de TV, el Complejo Cultural de la República, la Catedral Metropolitana y la Plaza de los Tres Poderes.
2 Fernando de Noronha:
Situado frente a la costa de Pernambuco, este archipiélago de veintiún islas e islotes fue designado Patrimonio Natural de la Humanidad por la UNESCO. Sus playas del Sueste, Sancho y Leão tienen rampas de acceso, sillas anfibias y profesionales capacitados para atender a todos los turistas.
3 Maceió, Alagoas:
Es uno de los destinos más populares del nordeste brasileño gracias a su similitud con el Caribe ya que tiene corales, clima caluroso todo el año y agua transparente en playas de arenas blancas repletas de cocoteros.
En el balneario de Pajuçara se realizan actividades recreativas a cargo de entrenadores especializados en personas con discapacidad.
4 Fortaleza, Ceará:
Este estado nororiental brasilero combina playas con acantilados pero también sobresale por su programa Playa Accesible en alianza con los municipios de Fortaleza, Caucaia, Aracati y Aquiraz.
Desde 2016 ya colaboró con 8.000 personas que así disfrutaron al máximo de la naturaleza e infraestructura. La capital de Ceará tiene vuelos diarios desde y hasta Rio y São Paulo.
5 Río de Janeiro:
Las playas de Copacabana y de la Barra ofrecen su servicio Playa para Todos. En Copacabana, funcionan en los puestos 5 y 6 frente a la calle Francisco Sá. En la playa de Barra se encuentra en la parada 3 con actividades gratuitas de baño de mar, voleibol sentado, piscina infantil, frescobol adaptado, handbike, con el auxilio de profesionales de educación física, fisioterapeutas, terapeutas ocupacionales y voluntarios. Además, el proyecto brinda adaptsurf para los más aventureros ya que se trata del surf adaptado.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) calculó que el 15% de la población mundial -mil millones de personas– padece algún tipo de discapacidad.