Desde el medio resaltaron dos términos fundamentales que son amor y resiliencia, asegurando que estos dos factores fueron frecuentes durante toda su visita, en su recorrido y en la conversación con las personas oriundas del la localidad. Sin embargo, en el sitio destacaron más las sensaciones de alegría y esperanza que rebosaba tanto el ambiente como la gente misma.
“Nada que nosotros podamos decir con estas palabras escritas podría aproximarse relativamente a la intensidad y empatía de los testimonios recogidos”, publicó el medio en su página web haciendo referencia a la experiencia única, la cual dejaron plasmada en un video con el recorrido.
La historia relatada con el fondo de murales que hablan por sí solos por parte de “Maye” los hizo transitar por la expectativa, la admiración y la emoción.
Finalmente, participaron de una charla en “Las Berracas” en el marco de un singular almuerzo en base a un mix de carnes y guarniciones exquisitas que terminó de completar la experiencia.
La Comuna 13 no es apenas una comunidad diferente en un enclave de trágica historia con un presente envidiable y un futuro seguramente venturoso, debería ser además apreciado como un modelo ejemplar que podría llegar a imitarse más temprano que tarde en toda América Latina.